5 nov 2007

Salman Rushdie y versos satanicos




En el año 1989 el Ayatolá Jomeini quien era el jefe religioso del gobierno de Irán, demando o puso precio a la cabeza del escritor ingles Salman Rushdie, quien según Jomeini había insultado al Corán con su libro Los Versos Satánicos, donde además proclamaba su renuncia del islamismo por lo que según Jomeini eso debía ser castigado con la muerte.



Desde ese momento el escritor nacido en Bombay (hoy Mumbay) en el año 1947 , se estuvo ocultando debido a la amenaza de muerte que habían lanzado desde Irán.



Su libro Los Versos Satánicos fue prohibido en un gran número de países (casi todos practicantes del islam) Y para continuar y hacer más precaria del ya escondido Rushdie, Jomeini ofreció 3 millones de dólares para quien asesinara al escritor inglés.



Otra de las amenazas que profirió Jomeini fue las represalias que se debían tomar contra los editores y traductores quienes accedieran a publicar la obra. Se conoció que en Italia el traductor de la obra fue apuñaleado pero no se si murió.



Aquí el libro llegó y se vendía como una especie de mercancía ilegal pero se exhibía en las vitrinas. Se que varias veces vi el libro en distintos lugares pero ni lo tocaba, con ese nombre... pinga!!! ¿A ver si lo leía y me salía el diablo? No que va...



Supe que mucha gente lo leyó pero al terminarlo de leer sus opiniones eran muy... neutras porque según supe después era un libro sobre una cultura que no es muy cotidiana con la nuestra.



Evidentemente el anonimato de Rushdie fue también gracias al MI6 y a los cuerpos de seguridad ingleses. En el año 2006 este autor fue nombrado Caballero por la Reina de Inglaterra.

Durante su anonimato el estado iraní dobló la recompensa por la cabeza del escritor, pero el año siguiente el estado musulmán desistió de la Fatwa en un tratado de cooperación entre Inglaterra e Irán, aunque algunos declaran que la Fatwa debe quitarla quien la convocó y como Jomeini está muerto...

Este personaje dio que hablar durante unos años, con sus cejas arqueadas y pelo despeinado de verdad parecía un verdadero diablo.