Eso a consecuencia de las malas decisiones que fueron tomadas por los directivos de la empresa canadiense cuando en 2007 apareció el iPhone. Blackberry tenía su mercado, pero volvieron a cometer el error que cometió Nokia con su Symbian. No se centraron en desarrollar hardware y dejaron el software en manos de terceros, y bueno... aquí el resultado.
Pero esto no significa que la empresa cierre ni mucho menos. Cerrará la fabricación de teléfonos, los equipos de la empresa los fabricará otra empresa (un tercero) pero RIM decidió que era hora de poner las barbas en remojo y dedicarse al negocio de ellos, las aplicaciones profesionales de seguridad.
De todas maneras no te emociones de tener un viejo BB guardado que puede que algún coleccionista te compre por miles de dólares... Blackberry se va, pero esperemos que vuelva... no sería bueno para nosotros los consumidores, que solo existieran Apple y Samsung en el mercado de teléfonos y tablets