Si te miras a ti mismo en un espejo por 10 minutos, tu cerebro empezará a crear ilusiones ópticas conocidas como Efecto Troxler.
Verás
tu cara distorsionarse, tomando rasgos de tus padres o personas
desconocidas. O incluso en algunos casos espeluznantes, se convertirá en
un monstruo.
¿Vas a probarlo? tienes que verte fijamente durante 10 minutos y comienza la diversión.
Tomado de Taringa